Pobladores agotan acciones para buscar una intervención efectiva por parte de autoridades estatales
MIROSLAVA HERNÁNDEZ/TNChiapas
Muertes, retención, bloqueos carreteros, incendios y decenas de personas lesionados son el saldo del incesante conflicto que afronta Altamirano, en donde desde hace más de dos meses, ejidatarios y autoridades concejales mantienen una preocupante disputa que, con el paso de los días ha ido afectando en mayor medida a la estructura social del municipio.
La difícil situación en que se encuentra sumergida la localidad, ha sido motivo de múltiples y desesperados llamados de auxilio por parte de los habitantes del lugar, quienes en reiteradas ocasiones han demandado la intervención de autoridades estatales para que estas den fin al conflicto que ha desestabilizado la paz en el pueblo, desafortunadamente, poco o nada han funcionado sus súplicas, puesto que, aun cuando han conseguido establecer reuniones con autoridades chiapanecas, la problemática continua sin alcanzar un acuerdo que dé solución a los enfrentamientos.
En consecuencia, dicha crisis ha incentivado a que la población intensifique sus acciones en busca de una mediación efectiva que remedie el conflicto, de esta forma, han optado por bloquear varias calles de la cabecera municipal de Altamirano, esto con el objetivo de presionar a las autoridades a tomar medidas concretas.
La última de estas movilizaciones se registró el pasado 6 de enero, día en que las y los pobladores, con el apoyo de piedras, palos y otros objetos, bloquearon las principales avenidas del centro de Altamirano. Por desgracia, tales manifestaciones han dado lugar a otro tipo de afectaciones, y es que, al impedir el paso a los vehículos, los habitantes del centro se han quedado prácticamente secuestrados, dado que solo pueden salir caminando.
De esta manera, una segunda problemática se hace presente en la localidad, misma que perjudica especialmente a quienes intentan introducir mercancía en tiendas de abarrotes o mercados, dejándoles, como única opción, ingresar sus productos a pie.
Cabe mencionar que las demandas de los ejidatarios, datan del pasado 8 de agosto del 2023, y en ellas exigen la desaparición del concejo municipal, al cual acusan de construir obras públicas de mala calidad en la cabecera de Altamirano y en otras comunidades del municipio. No obstante, a pesar de las quejas, autoridades concejales a la fecha se mantienen firmes a su postura y sin ceder a las exigencias de la población.
Asimismo, las y los habitantes, reclaman que aun cuando en la entrada de Altamirano hay presencia de elementos de la policía estatal, esto no ha surtido efecto alguno en el restablecimiento del orden en el municipio. Ante esta situación, de nueva cuenta instaron a las autoridades a establecer el estado de derecho y resolver de manera inmediata esta crisis que afecta a la vida diaria de miles de habitantes en el municipio
Más historias
El gobierno estatal refuerza lucha contra analfabetismo
Congreso impulsa el talento chiapaneco
Avendaño Bermúdez llama a eliminar la discriminación