Día de la Chiapaneca, una celebración deslumbrante

Mujeres lideran la celebración con devoción, colores y música vibrante, tejiendo una identidad
cultural

CARLOS RUIZ/TNChiapas
FOTO: JACOB GARCÍA

Los colores y la tradición se entrelazaron en la Fiesta Grande de Chiapa de Corzo el día de ayer
domingo, donde cientos de chiapanecas desbordaron alegría en una danza vibrante que marca el
Día de la Chiapaneca.
Al ritmo del tambor, marimba y música de viento, las mujeres encabezaron la procesión, cargaban
con devoción al vicario de San Sebastián, el santo patrono de la festividad. Este emotivo desfile es
el corazón de la celebración, donde la esencia chiapaneca se despliega con cada paso.
En un espectáculo de tradición y folclore, las chiapanecas danzaron con gracia y vitalidad, tejiendo
un tapiz de movimientos que honran la rica herencia cultural de la región. La música envuelve las
calles, mientras las mujeres distribuyen dulces y confeti, compartiendo la alegría de la festividad
con todos los presentes.
La Fiesta Grande no solo es un evento religioso, sino un testimonio de la identidad chiapaneca,
donde la comunidad se une para celebrar sus raíces y fortalecer los lazos de tradición y devoción.
La riqueza de la cultura chiapaneca se manifiesta en cada detalle, desde los trajes coloridos hasta
los gestos de camaradería que permea en el aire festivo.
La magia de esta festividad radica en su capacidad para transportar a los participantes a través del
tiempo, porque conectan el presente con las ancestrales raíces de Chiapa de Corzo. La danza, la
música y la comunión enriquecen el espíritu, al crear un momento único donde el pasado y el
presente convergen en una celebración resplandeciente.
En ese Día de la Chiapaneca, la Fiesta Grande de Chiapa de Corzo se erige como un faro cultural, al
iluminar la diversidad y la esencia vibrante de esa tierra. La comunidad, ataviada con orgullo en
sus trajes tradicionales, da vida a una celebración que trasciende el tiempo, uniendo generaciones
en una danza que enaltece la identidad chiapaneca.

La magia de esta festividad radica en su capacidad para
transportar a los participantes en el tiempo