La institución refuerzó su compromiso con la inclusión social, poniendo en marcha una estrategia educativa
KEVIN NARVARTE/TDN
El analfabetismo en Chiapas sigue siendo un obstáculo importante para el desarrollo social y económico del estado. En respuesta a este reto, el Colegio de Educación Profesional Técnica en Chiapas (Conalep) ha dado inicio a los Círculos de Estudio ALFA, una iniciativa del Programa de Alfabetización “Chiapas Puede”. Esta propuesta no solo busca enseñar a leer y escribir a los adultos, sino también ofrecer herramientas para el empoderamiento personal y laboral, contribuyendo a una transformación social más profunda.
A través de este programa, los Círculos de Estudio ALFA se convertirán en espacios de aprendizaje donde los participantes, en su mayoría adultos que no tuvieron acceso a la educación básica, podrán adquirir las habilidades necesarias para mejorar su calidad de vida. La acción toma relevancia no solo por su objetivo educativo, sino por el impacto que puede generar en la autonomía económica de sus beneficiarios.
El Conalep Chiapas, al ser el primer subsistema educativo en poner en marcha esta estrategia, se convierte en pionero en la incorporación de un enfoque integral para combatir el analfabetismo en el nivel medio superior. La iniciativa va más allá de la enseñanza convencional, incorporando herramientas que incluyen educación financiera, prevención de violencia y equidad de género, temas esenciales para fortalecer la toma de decisiones informadas entre los adultos que participan.
En este esfuerzo también juega un papel clave la colaboración con el personal docente y administrativo de los planteles, quienes no solo facilitarán la enseñanza, sino que también brindarán apoyo y orientación a los participantes durante todo el proceso. A través de esta red de voluntarios, los Círculos de Estudio ALFA se convertirán en una oportunidad de unión comunitaria que promueve la solidaridad, la inclusión y el respeto por la diversidad.
Este tipo de programas no solo transformarán a quienes participan, sino que tienen un impacto que reverbera en las comunidades. En una región donde el acceso a la educación sigue siendo limitado, iniciativas como “Chiapas Puede” demuestran que la alfabetización es mucho más que un acto educativo: es un camino hacia la equidad y el progreso.
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