Los aspirantes de Morena a la presidencia de Tuxtla

Sarelly Martínez Mendoza

Cuatro políticos se disputan la candidatura de Morena a la presidencia municipal de Tuxtla Gutiérrez: Ángel Torres Culebro, exsecretario de Obras Públicas; Aquiles Espinosa, exsecretario de Movilidad y Transporte, y los empresarios Felipe Granda y María Mandiola.
​Ángel Torres, el candidato del gobernador, ha bajado sus pretensiones: quiso ser “un ángel para Chiapas”, pero ahora quiere ser “un ángel para Tuxtla”. Su estrategia de posicionamiento es muy parecida a la de Pepe Cruz: ha tapizado la ciudad con su nombre y su imagen. Le sigue, en ese dispendio de propaganda Aquiles Espinosa, quien es apoyado por el presidente municipal Carlos Morales Vázquez.
​Ambos aspirantes, sin embargo, carecen de atributos para convertirse en buenos candidatos para la presidencia municipal. En una de esas y despiertan las simpatías por Paco Rojas, un candidato acostumbrado a fastidiar a sus oponentes políticos.
​Ángel Torres ha sido un pésimo planeador en Tuxtla Gutiérrez. Los puentes vehiculares construidos en la ciudad, por ejemplo, siguen inconclusos. En el del Libramiento Sur y Once Poniente no han instalado los transformadores para reemplazar a los que estaban antes de la edificación de la obra.
​Esto ocasiona problemas de falta de energía eléctrica a los comercios y habitantes de la zona, y debido a las instalaciones improvisadas con frecuencia ocurren cortos circuitos, los cuales pueden ocasionar accidentes con consecuencias fatales. Ojalá y no, pero es una posibilidad ante esta obra inconclusa.
​Además de que los puentes no están totalmente terminados, fueron entregados meses después de lo programado. El “puente atirantado” que se edifica por la Torre Chiapas debió haber concluido el 15 de noviembre de 2023, como lo anunció Ángel Torres el 26 de diciembre de 2022, cuando iniciaron las obras, pero lleva más de un año y todavía no hay fecha de inauguración.
​Es cierto que se abrió un carril lateral, pero la medicina es peor que la dolencia que se tenía al transitar por las calles alternas. Este lunes 8 de enero, con el inicio de actividades escolares, pasar por ahí es un suplicio.
​Es mal planeador, digo, y los habitantes cercanos a los puentes somos los que sufrimos las consecuencias.
​Ángel Torres, además, engaña con su currículum. Afirma, por ejemplo, que estudió en la UNAM. Escribe: “Licenciatura en Derecho por el Centro de Estudios Universitarios (UNAM)”. Lo cierto es que ese centro estuvo incorporado a la UNAM, como otras muchas escuelas particulares, pero no es parte de los centros de la Universidad Nacional Autónoma de México. Pequeño detalle.
​Como secretario de Obras Públicas, Ángel Torres favoreció a empresas de otros lugares, principalmente tabasqueñas, en perjuicio de los constructores chiapanecos. Es la peor etapa que han vivido las empresas chiapanecas dedicadas a la construcción. No solo han tenido pocas obras, sino que se les exige el 25 por ciento de comisión del monto cuando ganan algún concurso, y ha sido una práctica habitual en su gestión, según denuncian varios constructores, que a las empresas solo se les compre facturas con un pago del tres por ciento.
​Tampoco Aquiles Espinosa es un candidato carismático. Más que promover su currículum, que no destaca como buen funcionario, se apoya en el trabajo de Carlos Morales Vázquez.
​A fines de este mes sabremos quién encabezará la candidatura de Morena en Morena. No hay actualmente una encuesta seria que nos permita conocer realmente las preferencias electorales en la capital. Las que circulan están hechas al gusto de cada aspirante, por lo que no es posible sacar conclusión alguna. No veo a un aspirante que lideree las preferencias electorales; seguramente las diferencias deben ser mínimas entre los cuatro principales contendientes.
​No se puede pasar por alto que, ante las dificultades de Morena por encontrar un buen candidato para la presidencia municipal de Tuxtla, puede alzarse de nueva cuenta Paco Rojas, quien después de un bache en su popularidad, puede recuperarla ante la grisura de los aspirantes morenistas.